AMBIENTE 2050



Río de La Matanza. Nombre a su medida

Hoy somos más de 5 millones las personas que habitamos la cuenca del Matanza - Riachuelo: una superficie de 2200 km2 que abarca además de la Ciudad de Buenos Aires los partidos bonaerenses de Avellaneda, Lanús, Lomas de Zamora, Almirante Brown, La Matanza, Esteban Echeverría, Ezeiza, Cañuelas, Las Heras y Marcos Paz. El pus de ese rio  es hoy plomo, compuestos nitrogenados, patógenos de todo tipo y origen aunque predominantemente fecales, basuras sólidas, barcos hundidos, residuos peligrosos... Los  responsables: la ignorancia (en realidad los ignorantes), la mediocridad (los mediocres), la delincuencia ambiental, la demagogia y la inconsciencia minuciosamente ejercitada por los funcionarios que no nos representan, y que tienen nombre y apellido.

Al respecto, no pueden mentir falta de recursos, basta analizar sus decisiones. La Asociación de vecinos de La Boca (I.G.J. Nº 1.707.122  R.O.A.C. Nº 1794) publicó que:

“De los U$S 250 millones que el B.I.D. tenía dispuestos para las obras de saneamiento (crédito 1059/OC-AR año 1997 para amortizarse en 20 años), hoy quedan 93 millones a refinanciar, pues U$S 150 millones fueron inconsultamente desviados a "planes sociales". Únicamente se aplicaron a la Cuenca U$S 7 millones de los cuales sólo un millón se destinó a obras, pues el saldo se aplicó a estudios de consultorías y pagamos en concepto de tasa de compromiso (multa por no usar el préstamo) la suma de ¡U$S 6 millones de Dólares!”

La salud no vota, la morbilidad infantil tampoco. Las muertes por diarreas estivales son causa “declarada” de la fatalidad y no de verdaderos delitos por la imprevisión y la corrupción al servicio de intereses de sectores. Y en nuestro distrito (Esteban Echeverría) las inundaciones son culpa de las lluvias y no de la falta de planeamiento, de obras de limpieza, de trabajo e inversión en donde debe ponérsela en tiempo y forma, y no sólo gastos preelectorales.

Las crecidas y la enfermedad no entienden que las campañas ocurren sólo cada cuatro años.

La discusión respecto de si mil días, parece que viene desde hace más de cien años. Es tiempo de obrar y dejar de declamar, de  constituír un comité de cuenca que sepa de qué se trata y no de meros amigos. Estudios hay muchos, maniobras de distracción algunas,  obras... ¡nada!

El Riachuelo y el Matanza son sólo una parte del monumento a la inutilidad y a la corrupción, el problema es que no sólo se trata de dinero sino que se trata de vida, de enfermedad y hasta de muerte... Además de este grave problema irresuelto por la Provincia de Buenos Aires, por la Nación y por la Ciudad de Buenos Aires que comparten la cuenca, otros acuciantes riesgos están en la olvidada lista de espera de la decisión y la acción provincial: basurales y más basurales humeantes se extienden en la entrada de las ciudades, y a lo largo de las rutas (por ejemplo el caso de la Ruta 11 en la Ciudad de Dolores, o la ruta provincial 58 en el Municipio de San Vicente), otros de mayor envergadura y aún irresueltos como el caso de General Pueyrredón, además de los más de 50 millones de toneladas de residuos que conforman el "Macizo de la costa del Río de la Plata" desde Villa Domínico (Partido de Avellaneda) hacia Quilmes... De su pasivo ambiental y de los intentos de diluir responsabilidades nos ocuparemos en la segunda parte de esta serie de notas.

Siguiendo con la "lista de espera" y sin ser exhaustivos está la contaminación industrial en Bahía Blanca, la amenaza para propios y extraños en Puerto Piojo (Dock Sud, Avellaneda), la "escondida"“ planta de la localidad de Abott en las cercanías de Cañuelas, el río Reconquista, el Luján... el deterioro del potencial turístico, biológico (en términos de biodiversidad) y productivo del Delta del Paraná...

Por si fuera poco, la amenaza de transitar por territorio provincial y procesar en él combustibles nucleares gastados (o francamente residuos) provenientes de terceros países.

Queda preguntarse hasta cuándo se tensará la cuerda ambiental en la Provincia de Buenos Aires... La falta de seguridad es también ambiental, por más espectaculares que sean los secuestros de cada día.

Lic. Biol. Norma Haydee Rodriguez

Abril 2005